(Agencias Perrovaca) Tras el anuncio del rector de San Marcos Pedro Cotillo, de que se suspenderían las clases debido a la llegada del Fenómeno del NIño, trascendió que la principal razón de su apuro se debe a que especialistas le advirtieron de que el período de lluvias podría afectar las labores de sus operadores políticos, quienes en estas fechas están muy ocupados haciéndole budú y brujería negra a los congresistas que aprobaron la Ley Universitaria.
De tal modo, se supo que las lluvias, que apenas y se presentarían como una ligera garúa en la ciudad, impedirían que Cotillo pueda seguir hablando de presencia senderista en San Marcos, pues el resto del país estará concentrado en el desastre nacional que significa El Niño. “A Cotillo le gusta hablar de Sendero para quedar como un héroe, a pesar de que los cuatro gatos senderistas fueron los que lo pusieron en el poder. Si queda como héroe antiterrorista cuando los alumnos lo intenten sacar podrá decirle a la prensa que se trata de un ataque senderista en contra de su gestión. Pero, ¿quién le va a parar balón al zambo si todos los medios estarán cubriendo las lluvias?”, sostuvo un operador suyo, mientras compraba diez chaufas para pagarle a un Tercio Estudiantil los servicios prestaos.
El farmacéutico, cuyo máximo logro académico ha sido alquilarle dos semanas el Estadio a los evangélicos, también estaría pensando coordinar con José y María para que adelanten el parto de Jesús, y apurar a los Reyes Magos para que hagan más rápido el viaje a Belén, pues estos también le quitarían protagonismo con su famosa Bajada.
Al cierre de esta edición, Cotillo estaba dictando un taller, denominado “Chapa tu lúmpen y dale su decanato”, que congregó a los profesores más reconocidos por nunca haber escrito un solo artículo científico en su vida, quienes han sido llamados para seguir tomando las riendas de la vanguardia sanmarquina, y llegar a la meta trazada al 2025: producir menos investigación que Villarreal.
